A diez días de diciembre todo parece indicar que presentaremos el informe final en este veraniego mes. Es decir, por qué no hacerlo: tenemos la capacitación hecha, los sitios creados y funcionado, pasó el congreso de comunicación alternativa y escribimos mucho durante todo este tiempo. ¡Ah! Quizás porque estamos a menos de un mes de que terminen las clases y hacer que hacer un informe.
Como sea. Una vez en el baile, hay que bailar. Reunión mediante con nuestro tutor remodelamos el indice. No es que el anterior estuviera mal, sino que simplemente no servia. Lo que habíamos escrito con el antigüo orden se guardó, archivó y ahora se recorta para cubrir los nuevos requerimientos. Un despelote, pero no nos podemos dar el lujo de perder nada.
Descordinado. Poco coherentes y hasta ofuscado. Así me siento. Detesto resolver cosas en dos patadas, porque nunca me salen como quiero.
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